Una gran tormenta me dejó varado en la empresa con mi colega

Como siempre, cuando el reloj que tengo en la mano marca las 17:00 horas, es hora de salir del trabajo, pero hoy el tiempo es diferente, una tormenta me impide salir de la empresa, el último tren está a punto de llegar. En el camino, todos en casa me están esperando, pero mi situación realmente no puede mejorar. Para mí, este es un mal día, eso es lo que pienso, pero hasta que sepa que mi compañero de trabajo está. Tampoco pudo regresar debido a esta tormenta. En ese momento, mi espíritu fue liberado de pensamientos negativos, reemplazados por palabras de aliento para esta encantadora colega. Hablamos durante bastante tiempo y decidimos permanecer juntos hasta el final.